El futbolista, con una rapidísima adaptación a nuestro fútbol, acumula cifras escandalosas en su primera temporada como jugador del Madrid.
El Real Madrid ha ganado la Liga, pero no es suficiente. Con la mente puesta en el partido contra el Bayern Múnich del próximo miércoles, el conjunto de Carlo Ancelotti busca otra final de Champions League dos años después de la última, que ganó al Liverpool en París con un solitario gol de Vinicius.
Una de las sensaciones de la Liga actual, y más en el Madrid, ha sido Jude Bellingham. El centrocampista inglés llegó el verano pasado procedente del Borussia Dortmund, en una operación que se cerró en torno a los 100 millones, y, desde el primer día, irrumpió con fuerza, carácter y arrojo para llevarse todos los focos.
Su rápida incorporación -algo inusual en los ingleses- al fútbol español sorprendió a propios y extraños, máxime cuando el británico tenía ofertas mucho más atractivas que la del propio Real Madrid. El entorno de la Premier, con el Manchester City a la cabeza, podría haber sido una probabilidad para Bellingham, que, sin embargo, tal y como él ha reconocido, no se lo pensó ni en segundo en cuanto supo el interés del Madrid en hacerse con sus servicios.
Preguntado recientemente por las sensaciones de la temporada y con qué momentos se quedaba, el ‘5’ blanco contestó con el Clásico, “tanto con los goles como ayudar a nuestro equipo”, en un mensaje directo para el Barcelona. Bellingham, que ha marcado a los culés en los dos partidos de Liga -en Montjuic, fue el artífice de la remontada (1-2) con un ‘doblete’ y, en el Bernabéu hace dos semanas, marcó el gol de la victoria en el 91’-, acumula cifras escandalosas pese a que su posición no es la de delantero: suma 22 goles y 10 asistencias.
Además, con el gol que anotó ante el Cádiz este fin de semana y que supuso el 2-0, Bellingham se ha convertido ya en el primer jugador que no es delantero en marcar 22 goles en todas las competiciones en su primera temporada con la camiseta del Real Madrid. Un fichaje que, no hay dudas ya, ha salido más que rentable. Incluso barato. Otro golazo de Florentino, éste desde los despachos.