En el Madrid cuentan con tener a toda la plantilla recuperada para el partido del 26 de octubre ante el Barcelona, salvo uno. Al que se da por seguro como baja es a Rüdiger. Sin embargo, se cuenta con Trent, Carvajal, Huijsen e incluso con Mendy, aunque este último siempre genera dudas, pero las estimaciones indican que podría estar si nada se tuerce en las próximas dos semanas.
Por tanto, el único descartado fijo es el central alemán. El resto, se cuenta con ellos para la cita ante los catalanes, y es una grandísima noticia para Xabi Alonso, que va a poder contar con una gran plantilla para vencer al Fútbol Club Barcelona. Será un duelo muy difícil, porque los madridistas no se olvidan de lo que ocurrió en los 4 Clásicos de la pasada temporada. Ahora tienen la oportunidad de cambiar la situación.
Se calcula que Rüdiger podría estar disponible en el mes de diciembre, pero todo dependerá de cómo evolucione su lesión. Con 32 años, las recuperaciones no duran lo mismo que cuando tenía 26 o 27. Menos todavía cuando es una lesión un tanto complicada. Por eso mismo, el futbolista debe ser prudente, y también el técnico a la hora de darle minutos. Es mejor que se recupere bien a arriesgarse y que se produzca una recaída.
El Madrid estaba cuidando a Rudiger. Alemania lo puso 180 minutos. Es lo de siempre. Hoy Rudiger se ha lesionado en la pierna de la rodilla que se operó y estará mucho tiempo de baja. pic.twitter.com/G6OKXcdB4C
— Ramón Álvarez de Mon (@Ramon_AlvarezMM) September 12, 2025
Un partido clave
El Real Madrid está casi obligado a ganar el Clásico de Liga después de lo ocurrido en los últimos 4 partidos y lo que pasó en el último derbi madrileño. Hace bastante tiempo que el conjunto madridista no gana en un partido grande y necesita hacerlo para dar un golpe encima de la mesa y coger moral. Además, de esa manera se asentarían en el liderato de LaLiga y darían un golpe importante al conjunto blaugrana.

Todos los futbolistas tienen muchas ganas de este partido. Además, el hecho de jugarse en el Santiago Bernabéu es un extra de motivación, porque quieren reivindicarse delante de toda la afición. Eso sí, en caso de derrota o de una superioridad aplastante de los blaugranas, el público también será muy exigente, sobre todo si los futbolistas no muestran garra y actitud.