El Real Madrid ya tiene la mirada en el Liverpool, un rival que no pasa por su mejor momento, pero que se gastó cerca de 500 millones de euros durante el verano, por lo que la presión que tendrá sobre sus hombros el próximo martes es máxima, algo que espera aprovechar el propio Xabi Alonso.
Esto explica que el tolosarra quiera dejar atrás el duelo con el Valencia, aunque el técnico vasco entiende que la buena versión de sus futbolistas ante el equipo che es algo que refuerza a la plantilla merengue para visitar Anfield.
«Hemos empezado muy dinámicos, con mucho movimiento y buena circulación de balón. Recuperábamos rápido y nos hemos puesto por delante. Luego lo hemos gestionado todo bien y, en general, ha sido un partido redondo. Han salido bien las cosas. En la segunda parte hemos podido gestionar bien porque sabíamos el partido que tenemos el martes. Había que ser inteligentes porque había jugadores con muchos minutos cargados y han salido muchas cosas bien. No queremos relajarnos y queremos afrontar cada partido con la preparación mental necesaria. Hoy lo hemos hecho. Ahora toca el martes en Champions y el domingo en Vallecas. A partir de mañana Liverpool y Liverpool”, expresó Xabi Alonso en rueda de prensa tras golear 4-0 a los valencianistas.
Mucho más que tres puntos
Sin embargo, en este partido habrán en juego mucho más que tres puntos, principalmente por lo deportivo, ya que el Real Madrid está invicto en la actual edición de la UEFA Champions League, condición que espera mantener tras visitar Anfield, ya que esto les acercará a quedarse con el liderato en la fase de liga de la competición continental.
Además, este duelo también podría tener un impacto en los despachos, especialmente porque los dos equipos están en la carrera por 3 jugadores para la 2026-2027.

El primero y más evidente es Ibrahima Konaté, pero también Marc Guehi, jugador del Crystal Palace, así como el propio Alexis Mac Allister.
Estos 3 futbolistas estarán en boca de todos en el mercado de fichajes del próximo verano, por lo que el Liverpool y el Real Madrid tendrán mucho que decir en estos casos, aunque el más complicado para el madridismo es el del argentino, sobre todo porque tiene contrato vigente con los reds y sacarle de Anfield es prácticamente una misión imposible, aunque esta palabra nunca ha estado en el vocabulario de Florentino Pérez.