Vinicius Jr. y Xabi Alonso están más conectados que nunca. A pesar de que su relación no empezó bien, el técnico donostiarra ha reconducido con mano izquierda la situación y ha logrado que el brasileño empiece a creer en el nuevo proyecto. La mediación de Florentino Pérez entre ambos fue el inicio, pero Xabi Alonso no solo ha obedecido órdenes. También ha entendido que va en su beneficio tener contento a uno de los jugadores con más talento de la plantilla. Vini, por su parte, solo quiere ser feliz sobre el verde.
Y con la nueva posición que ha estrenado en el campo en los últimos partidos, partiendo desde la izquierda pero mucho más liberado en defensa y colocándose casi como pareja de Mbappé en ataque, se siente mucho mejor. Este nuevo rol obliga a otros futbolistas como Bellingham a jugar más abajo, y a Xabi le ha costado tener que bajar su apuesta por Arda Güler porque no le caben todos los futbolistas de talento en el medio. Ahora necesita más jugadores que corran por los de arriba.
El vestuario en líneas generales respira aliviado por la rebaja de tensión que ha supuesto la reconducción de la situación entre Xabi y Vinicius, que han pasado de casi no dirigirse la palabra a estar en perfecta conexión. Este cambio no solo se traduce en una mejoría sobre el campo, sino que pronto puede derivar en la renovación del contrato del brasileño, que tiene ganas de seguir y que solo había puesto como condición un trato diferente por parte del entrenador.

El Real Madrid no va a pagar a Vini lo que exigía en los últimos meses porque el brasileño ha vuelto a disminuir sus pretensiones al entender que un futbolista no es más feliz por tener más dinero, sino por tener más éxito. Y lejos del club blanco hace mucho frío para cualquiera que ya ha sentido el calor del Bernabéu.
El abrazo de San Mamés
El abrazo entre Xabi y Vinicius en San Mamés escenifica la reconciliación. El Real Madrid tiene muy claro que la apuesta por el entrenador es firme, pero Florentino también está convencido de que Vini debe ser uno de los pilares del proyecto del técnico donostiarra. El presidente pidió a ambos que pusieran de su parte y así está siendo.
Las cosas, en cuanto han dejado de estar enquistadas, han empezado a fluir entre ambos y en el Real Madrid sienten que ahora son mucho más fuertes gracias a lo sucedido en estas semanas atrás. A pesar de que se han vivido momentos difíciles dentro del vestuario, todo está arreglado.
Hasta el futuro de ambos llegó a estar en entredicho, pero ahora ni uno va a dejar de renovar por el entrenador ni el técnico se va a ir por un boicot de la plantilla o por no saber gestionar a una de las grandes estrellas del equipo. El próximo paso es empezar a ganar partido tras partido para que todo siga yendo sobre ruedas.