El Real Madrid superó con nota el primer Clásico de la temporada. Xabi Alonso no podía desaprovechar la oportunidad de quitarse un gran peso de encima contra el eterno rival. Una semana le ha bastado para ‘matar’ dos pájaros de un tiro. El primer perdigón se lo llevó la Juve en la Champions y el último, infinitamente más doloroso, un Barcelona que vuelve en UCI a la Ciudad Condal.
Tan peculiar es el Real Madrid que, ni ganando 9 de 10 partidos de Liga, y haciendo pleno en Champions (3/3), se dejaba de criticar a Alonso. Con aquella cantinela de que no vence a los grandes. Todo por perder con el PSG en semifinales del Mundial de Clubes cuando llevaba unas pocas semanas al frente del equipo y por una malísima tarde en el derbi.
Ahora, ese ‘tufo’ desaparece tras vencer a la Juve y hundir al Barça en LaLiga. Ya van 10 victorias y 5 puntos de diferencia con los azulgrana. En una primera parte excelsa dónde los de Flick pudieron llevarse un saco. De no ser por fueras de juegos milimétricos o polémicas con el VAR. Tampoco es habitual que Mbappé falle un penalti. El francés, eso sí, marcó un golazo y le anularon otro todavía mejor por la uña de un dedo.
🚨 #ULTIMAHORA Carvajal reprime a Lamine Yamal por hablar mucho y casi se enganchan Vinicius y el jugador del Barça. pic.twitter.com/G9M4sNN7D6
— Defensacentral.com (@defcentral) October 26, 2025
Paso a paso
Nadie en su sano juicio discutirá que el Real Madrid ha evolucionado -para bien- con Xabi. Tocaba desarrollar un nuevo método tras la gloriosa época de Ancelotti, venida a menos en su última temporada. Ya no calaba el discurso. Se pedía a gritos aire fresco para competir en el nuevo escenario del fútbol moderno.

Roma no se levantó en un día, pero desde el primer ladrillo ya se intuía un destino imperial. Lo mismo presiento con este proyecto. Necesita tiempo, pero apunta alto. Los mejores futbolistas del mundo están aquí. Por eso, a Xabi hay que dejarle trabajar. Su arranque al frente del banquillo más exigente del mundo roza la matrícula de honor. Muchos no lo verán, pero os aseguro que a este Real Madrid ya se le está poniendo cara de campeón.