El Real Madrid analiza lo ocurrido en Mestalla y toma una decisión. Más allá del ámbito deportivo, donde ya se centran en el partido contra el RB Leipzig, los ejecutivos blancos no dudarán en recurrir lo que consideran injusto.
El partido en Mestalla terminó 2-2 y con la expulsión de Jude Bellingham con el tiempo cumplido. El ‘5’ inglés habría anotado el gol de la victoria en el estadio del Valencia, pero Gil Manzano señaló que había pitado el final apenas un segundo antes, mientras el balón centrado por Brahim Díaz volaba hacia su cabeza. Su incredulidad se reflejó en las protestas que hizo al acabar el partido.
La tensión fue tal que el mediocentro de Birmingham vio la cartulina roja: las protestas no gustaron a Gil Manzano y el colegiado extremeño le expulsó con roja directa.
Esta sanción, sumada a lo escrito en el acta arbitral del partido, significan un mínimo de dos encuentros de sanción para uno de los futbolistas clave del Real Madrid. La realidad de lo sucedido ha provocado que el club blanco se prepare para recurrir esa expulsión.
El objetivo último es eliminar la sanción, pero en las oficinas de Valdebebas considerarían una «victoria» reducir su expulsión a tan solo un partido. Su principal argumento se basará en lo ocurrido con Mason Greenwood hace varios meses.
El ’12’ del Getafe fue expulsado después de unas protestas al colegiado: el árbitro entendió que emitía un exabrupto en inglés… pero aquella roja directa se debió a una confusión idiomática.
Estrategia
Esa será la principal defensa del Real Madrid, así como las palabras del propio Jude Bellingham. El mediocentro inglés reclamó a Gil Manzano que el tanto debería haber contado para el marcador final. La confusión con el idioma será el argumento del Real Madrid en la apelación de la cartulina roja directa de Jude Bellingham, que parece haber dejado atrás este episodio para centrarse en el próximo partido: la vuelta de octavos de final contra el RB Leipzig.
La expulsión de Mason Greenwood por una situación similar sentaría una ‘jurisprudencia’ que ayudaría al Real Madrid a recurrir con éxito la sanción. Se acerca el sprint final de la temporada y en las oficinas de Valdebebas quieren que Bellingham esté disponible para el choque contra el Celta de Vigo. Si no fuera posible levantar su sanción, intentarían reducirla a tan solo un encuentro.