Las dos últimas convocatorias del Real Madrid han dejado varios nombres destacados: Jude Bellingham y Eduardo Camavinga. El regreso de estos dos futbolistas, que han trabajado a destajo para recuperarse de sus respectivas lesiones, son buenas noticias para Xabi Alonso. No solo porque cuenta con más efectivos para probar nuevas ideas y esquemas tácticos, sino porque podrá aumentar las rotaciones de futolistas que todavía no han tenido un merecido descanso.
Con Eduardo Camavinga de vuelta, el jugador que aparece en la mente de todos es Aurélien Tchouaméni. El excelente rendimiento del stopper rancés es motivo suficiente para que Xabi Alonso le haya señalado como uno de sus jugadores intocables, pero incluso el ’14’ debe descansar en algún momento de la temporada. El regreso del ‘6’ galo es una ventaja importantísima: será su reemplazo directo.
No en vano el propio Camavinga siempre se ha prodigado con buenos resultados en la base de la jugada… a pesar de que su desempeño como pivote dista mucho del perfil más ‘clásico’ que respenta Aruélien Tchouaméni. El joven mediocentro de ascendencia angoleña, como aseguraba Carlo Ancelotti, está lleno de «energía» y ua capacidad de desequilibrio que se antoja esencial para el primer equipo blanco. Sobre todo depués de los dos últimos partidos contra Real Sociedad y Olympique de Marsella.
Lo tiene muy claro
Durante su rueda de prensa previa al partido contra el Espanyol, Xabi Alonso ha reconocido que el equipo necesita cambiar su forma de afrontar las segundas partes. La reinserción de Eduardo Camavinga en la disciplina deportiva merengue podría ofrecer esa oportunidad de modificar los planes tácticos que ha pedido del míster de Tolosa a sus futbolistas. El jugador merengue se siente ‘obligado’ a dar el todo por el todo.
Porque el cuerpo técnico le ha estado ‘esperando’ desde el Mundial de Clubes. El entrenador vasco quiere dar minutos a todos sus futbolistas, para hacerse una idea general de sus virtudes y defectos, asignándoles así el rol definitivo que tendrán durante el resto del presente curso futbolístico. Uno de los pocos que faltaba por ser probado en ese sentido, aunque los preparadores blancos saben de su excepcional calidad, es el propio Eduardo Camavinga.

Paso a paso
Por lo pronto, su regreso habitual a las convocatorias con el primer equipo es una excelente noticia. La necesidad de contar con más efectivos en la medular se ha asentado con el paso de las primeras jornadas esta temporada, especialmente para facilitar la rotación de un centro del campo que apenas ha variado: solo Fede Valverde ha registrado su primera suplencia en la campaña 25/26.
Ahora sería el turno de un Aurélien Tchouaméni que está viviendo un 2025 para enmarcar. Ya durante los últimos meses de la etapa de Carlo Ancelotti fue uno de los pocos referentes del estratega transalpino en el Real Madrid. Su papel como titularísimo continuó durante el Mundial de Clubes, unos buenos resultados que se han prolongado a los primeros encuentros ligueros del nuevo curso futbolístico.
Xabi Alonso sabe que el ’14’ madridista es uno de sus intocables para los partidos más importantes de la temporada. Precisamente por ese rol de máxima responsabilidad se ha esperado tanto tiempo a Eduardo Camavinga. Con el ‘6’ galo de regreso, su compatriota tendrá un reemplazo directo sobre el césped que no alterará la calidad general del equipo y ofrecerá virtudes diferentes.