Iñigo Martínez abandonó el pasado verano el FC Barcelona por sorpresa y de una tacada ha recuperado la sinceridad que perdió durante el tiempo que estuvo en el Camp Nou. El defensa vasco ha hablado sobre el Balón de Oro tras la conquista del premio por parte de Dembelé y ha confesado que el año pasado se cometió una auténtica injusticia con Vinicius. El ex del Barça ha admitido que Vini debió ganar el Balón de Oro y que no fue lógico que lo ganara Rodri.
«El año pasado, esperaba que Vini Jr. ganara el Balón de Oro. Para mí, Vinícius era el mejor. Pero así son las votaciones, es lo que es… justo o injusto», ha confesado Iñigo Martínez, unas palabras que reflejan lo que piensan prácticamente todos los profesionales y aficionados del mundo del fútbol. Ni el propio Rodri podía creerse que le hubieran elegido a él. Vinicius fue el jugador más decisivo del año y nadie puede negarlo a pesar de las mofas.
Todo el antimadridismo ha aprovechado la circunstancia para reirse de Vini y del Real Madrid, que si balón de playa y muchas cosas más. Pero en el fondo, como Iñigo Martínez, todos tienen la certeza de que no fue justo que el brasileño se quedara sin el premio. Fue el mejor jugador del año, pese a quien le pese.
Es cierto que las votaciones son lo que son, y que se pueden cometer injusticias en algunas ocasiones. En esta ocasión, fue una injusticia más grande que una casa. Siendo Rodri un gran futbolista, no fue el mejor jugador del año 2024. En todo caso, había sido el mejor un año antes, en 2023. Y entonces no lo ganó.
Dembelé, un Balón de Oro justo
Muchas veces los aficionados no tienen claro qué baremos se siguen para elegir al Balón de Oro. Lo más normal es que lo gane un futbolista que haya sido líder de un equipo campeón de títulos importantes o de una selección ganadora de un título internacional. O un futbolista que haya marcado goles decisivos. O ambas cosas. Por ejemplo, Benzema en 2022. En su defecto, un futbolista que por su carácter haya liderado a un equipo histórico. Por ejemplo, Luka Modric en 2018.
Muchos pedían que Lamine Yamal ganara el Balón de Oro esta temporada, pero la verdad es que el futbolista del Barça no ha liderado a su club a un título internacional ni ha sido un jugador que haya marcado más goles que nadie en su equipo.
Dembelé, campeón de todo con el PSG, un equipo histórico que logró su primera Champions, fue un Balón de Oro justo porque fue el hombre que más goles marcó. Tampoco se podría haber considerado injusto de haberlo ganado Vitinha, que a su vez ha ganado títulos con Portugal en 2025.
Rodri, en 2024, ganó la Eurocopa con España pero se perdió la parte clave de la competición por lesión. No fue un jugador decisivo para esa conquista. Sí lo fue para ganar la Premier League con el Manchester City. Vini, por su parte, también ganó la Liga siendo el máximo goleador del equipo y campeón de Europa marcando en semifinales y final de Champions. Más decisivo imposible. Iñigo Martínez lo sabe y cualquiera con ojos en la cara también.