El staff técnico ha notado un bajón de Vinícius y Mbappé a la hora de recuperar el balón e implicarse en el juego del equipo. También a la hora de asociarse, con más jugadas individuales de Vinicius y menos apariciones de Mbappé, y eso lo nota el equipo. Pero no todo es culpa de estos dos jugadores, porque son muy pocas las veces que reciben el balón en contextos sencillos para ellos.
Al haber mala circulación de balón en el centro del campo, nutren muy poco y mal a Kylian Mbappé y Vinícius. Por eso mismo, en partidos donde hay pocos espacios, prácticamente no destacan. Ayer hay varias jugadas en las que se puede ver a Vinícius rodeado de 3 o 4 jugadores, sin tener otra alternativa que encararles, porque en el área tampoco había nadie al remate. Esto es algo a lo que hay que encontrar solución pronto, porque tiene que haber recursos en el área rival.
El equipo merengue está obligado a mejorar después del parón de selecciones. Si no, el equipo va a sufrir mucho durante este curso y no tardará en ser alcanzado por el Barcelona en la clasificación. Los jugadores no pueden volver a tener actuaciones como las de ayer. En el Santiago Bernabéu no tendrán ningún problema en pitar al equipo si consideran que no están dando el 100% en el terreno de juego.
Si Florentino Pérez quería que el equipo volviese a partirse en dos, Vinícius y Mbappé caminaran y pasaran de defender y el entrenador hiciera los mismos cambios siempre, no hacía falta fichar a Xabi Alonso.
Se podía haber quedado con Ancelotti.— Albert Ortega (@AlbertOrtegaES1) November 9, 2025
Deben marcar la diferencia
Kylian Mbappé y Vinícius Júnior son dos de los mejores futbolistas del mundo, pero deben demostrarlo en partidos como los de ayer y el del Liverpool. El brasileño fue de más a menos en ambos partidos, pero en el caso de Kylian, estuvo desaparecido en la totalidad de los encuentros. Estro es algo que no puede ocurrir, y mucho menos si aspiran a ser los mejores del mundo.

Además, deben dar ejemplo en la entrega y el sacrificio. Son los primeros que empiezan la presión en campo rival, y ayer se volvió a ver un desorden en este aspecto. Así es muy difícil competir, porque los rivales están corriendo bastante más que ellos.