Las declaraciones de Míchel, entrenador del Girona, han reflejado su opinión sobre los enfrentamientos contra el Barcelona en la Liga, desafiando la percepción de Xavi Hernández sobre la superioridad del equipo culé en ambos partidos, a pesar de haber perdido ambos por el mismo marcador de 4-2.
Míchel destacó que, en su opinión, el Girona tuvo oportunidades más claras en el primer partido y que lograron atacar las debilidades del Barcelona de manera efectiva.
Además, reconoció la dificultad de quitarle el balón al equipo azulgrana, pero destacó la capacidad de su equipo para aprovechar las oportunidades que se presentaron.
«En general no estoy 100% de acuerdo. En la ida nuestras ocasiones fueron mucho más claras. Quitarle el balón al Barça es muy complicado, pero atacamos bien las debilidades que pueden tener», aseguraba Míchel en declaraciones para la Cadena SER.
Nadie se cree a Xavi
Parece increíble que un entrenador de un equipo grande resalte que su conjunto ha sido superior ante otro que le ha metido ocho goles. Y no solo eso, sino que también dijo que había sido superior también en los dos partidos ante el Real Madrid, pese a perder también los dos.
Estas declaraciones de Míchel reflejan su visión táctica del juego y su confianza en las capacidades de su equipo para competir contra rivales de alto nivel, como el Barcelona, además de hacerle un retratado de época al técnico de Manresa.
Nadie a estas alturas se puede creer a Xavi, y sus declaraciones son una muestra de ser un equipo pequeño, que se conforma con ser «superior» pero no acabar ganando el partido.
Desde la prensa catalana ya incluso dudan de que el entrenador azulgrana continúe la próxima temporada dirigiendo al equipo, pese a haber confirmado su contunidad para el curso que viene.