El Real Madrid está listo para afrontar una ‘final’ este miércoles en el estadio Georgios Karaiskakis, en un duelo que corresponde a la jornada 5 de la fase de liga de la UEFA Champions League.
Esta cita con el Olympiacos es muy importante para el futuro del proyecto de Xabi Alonso, pero no por los resultados, que esos no tienen discusión, pero sí por las sensaciones que ha dejado el equipo merengue en las últimas semanas.
«Necesitamos un buen encuentro y después de estos últimos partidos volver a tener el sabor de la victoria. Para ello tenemos que jugar bien, con concentración y saber que es un partido importante para la clasificación. A pesar de estar con 9 puntos queremos sumar más. Después del partido de Liverpool y los dos siguientes de Liga, mañana queremos tener otro resultado», aseguró el tolosarra a los medios de comunicación en la rueda de prensa previa.
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— Defensacentral.com (@defcentral) November 25, 2025
Un peligro añadido
Sin embargo, Xabi Alonso, que es consciente de que el Real Madrid no ha ganado nunca en Grecia, se puede encontrar con algunos problemas, que afectarán a ambos clubes, pero más aún al desarrollo del juego de los madridistas.
La climatología es algo que preocupa al cuerpo técnico y de lo que ya han advertido a los jugadores del equipo merengue.
Más allá de la posible lluvia, que se anuncia puede caer durante el partido en el estadio Georgios Karaiskakis, hay un detalle muy peligroso, que puede dificultar mucho el desarrollo de este enfrentamiento que pertenece a la jornada 5 de la fase de liga de la UEFA Champions League.
En los actuales momentos, los expertos hablan de rachas de viento de 30 y 31 kilómetros por hora, una auténtica babaridad y que puede dificultar la circulación de la pelota si influye mucho dentro del césped, algo sobre lo que el Real Madrid ya está advertido.