Un día más en la oficina para Vinicius. Patadas, agarrones, insultos racistas… El combo completo lo volvió a sufrir en LaLiga y esta vez en Girona. En Montilivi le buscaron desde el minuto uno y, siendo el mejor del Real Madrid, sufrió una auténtica persecución.
Entradas criminales a la altura del tobillo, agarrones injustificados, reiteración de patadas… Todo con la permisividad de Javier Iglesias Villanueva, el árbitro que dirigió por primera vez un partido de campo del Real Madrid.
Vinicius Júnior, y hasta el propio Ancelotti, no daban crédito. De hecho, el árbitro no dudó en mostrarle tarjeta amarilla por protestar un pelotazo en la espalda, totalmente intencionado, que segundos antes le propinó un futbolista del Girona.
Tras la ducha en el vestuario y aún con el enfado, Vinicius publicó un mensaje en sus redes sociales. Contestando a una cuenta de twitter brasileña, llamada ‘Mundo da Bola’, que precisamente criticaba el arbitraje.
Respuesta
«Vinicius estaba tirado en el suelo y el jugador del Girona le pateó el balón. Vini se queja, el árbitro le saca amarilla, y al rival nada». Lo mencionó el madridista con una frase escueta, pero que ya es viral: «LaLiga», y unos emojis de desaprobación.
Y es que el madridista tiene claro que estas actuaciones arbitrales sólo se dan en el fútbol español. La competición dónde se premia al futbolista que da patadas y se castiga al que se queja por recibirlas. Esto es, como dice Vinicius, «LaLiga» de Tebas.