El Real Madrid ha ganado con autoridad esta noche en su visita a San Mamés gracias a un ‘doblete’ de Kylian Mbappé y otro tanto de Eduardo Camavinga y han noqueado a un Athletic Club (0-3) que apenas tuvo opción ante el potencial y la ambición de los blancos. Sin embargo, el partido quedó embarrado por unos hechos que pueden ser objeto de denuncia, cuando parte de la afición vasca dedicó varios insultos a Vinicius Junior, que tuvo que soportar incluso alguna peineta; unas conductas que ensucian, desde luego, la esencia misma del deporte.
Tras el encuentro, Vinicius, que le hizo un gesto a parte de los seguidores del Athletic que no cesaron en llamarle “tonto” y ridiculizarle con el ya famoso y repugnante “balón de playa”, en referencia al Balón de Oro que le ‘hurtó’ la UEFA hace más de un año, se marchó comentando todo esto con Éder Militao. “Yo no les insulto para nada, ellos me provocan y yo contesto con mis gestos…”, le aseveraba el delantero a su compatriota sobre esas imágenes que empezaron a circular en las redes sociales, con un gesto en el que mostraba tres dedos, los mismos goles que el Madrid marcó en Bilbao.
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Vinicius, que nuevamente fue titular, pudo marcar algún gol en la primera parte y, en una de sus ocasiones, dio al palo. Fue justo en el ecuador del primer tiempo, cuando sentó a Unai Simón y, con intención de asistir a Mbappé, se quedó sin ángulo y su disparo no llegó al segundo palo, donde estaba el francés, sino al primero, estrellándose justo en él y saliéndose el balón por la línea cercana a la portería del Athletic.
Vinicius fue uno de los últimos cambios de Xabi en el minuto 77, cuando decidió mover el banquillo y dar un respiro a los que acostumbran a ser titulares. De una tajada, el tolosarra decidió quitar a Vini, pero también a Militao y Mbappé. Salieron en su lugar Rodrygo Goes, Brahim Díaz y Gonzalo García. El ‘7’ volvió a ser un protagonista inesperado en un San Mamés inhóspito cuya parte de su grada volvió a superar límites con el astro fluminense.
Vini y el abrazo con Xabi
Vinicius dejó otra imagen que se ha viralizado rápidamente. Ocurrió que, cuando fue sustituido, el brasileño se fundó en un fuerte abrazo con Xabi Alonso. Una escena con la que ambos quisieron zanjar cualquier tipo de polémica que se ha hiperbolizado en las últimas semanas sobre una posible mala relación entre el extremo y el entrenador. Ambos, sin embargo, han negado siempre esta circunstancia, pero siempre han vuelto a sacar este tema para distraer y ‘vender’ que hay un mal ambiente en el vestuario.
En rueda de prensa, Alonso subrayó el “gran momento” en el que está Mbappé, recordando igualmente la gran conexión que tiene con Vinicius. El brasileño es una pieza esencial en el largo plazo del Madrid, que contempla renovarle próximamente, confiados en el club de que lleguen a un acuerdo… tarde o temprano.