La reacción de Vinicius a su cambio en el Clásico sigue dando de que hablar. El jugador brasileño estaba siendo uno de los mejores del partido. Su presencia supuso una auténtica amenaza para la defensa del FC Barcelona, especialmente para Jules Koundé.
Sin embargo, Xabi Alonso decidió cambiarlo y sacar a Rodrygo en su lugar. La decisión es difícil de entender para gente importante del club blanco. Afortunadamente, el choque terminó con victoria madridista y esto quedó en un segundo plano.
No es la primera vez que la relación entre el ‘7’ el cuadro merengue y el técnico donostiarra da que hablar. Es un asunto que lleva presente en clave madridista desde el principio del presente curso. Así pues, Fernando Burgos, periodista de Onda Cero, ha desvelado que el ‘7’ no es un intocable para el míster de Tolosa.
No sorprende ni extraña. Al fin y al cabo, tan solo basta con ver las decisiones que ha ido tomando Xabi en estos meses de competición. Incluso, lo ha dejado suplente, como ocurrió en Oviedo y, sobre todo, en el debut en Champions. Sin lugar a duda, esto último sorprendió.
Bien es cierto que Vinicius está volviendo a ser Vinicius, es decir, un jugador diferencial, determinante y que es capaz de resolver partidos desde la banda izquierda. Pese a ello, su actitud sobre el terreno de juego es un tema que sigue abriendo debates en diferentes medios de comunicación.
Los altos cargos del club reconocen que esos gestos y aspavientos están fuera de lugar completamente. Tal vez no merecía salir del verde, pero aún así debe de respetar este tipo de decisiones.
En la zona noble de Chamartín no se van a meter ni a juzgar al jugador por esta cuestión. Será el propio Xabi Alonso el que tenga que hablar con él para solucionar este conflicto de la mejor manera posible. Fue el mismo quien lo dijo en rueda de prensa. Actuó correctamente.
Vibró como el que más
Cuando salió del terreno de juego, Vinicius se marchó directamente al túnel de vestuarios. Aún así, regresó para vivir los compases finales junto al resto de sus compañeros. Una vez en el banquillo, estuvo muy pendiente de lo que daba de sí esos útlimos minutos. Los vio junto a Mbappé y Bellingham.
Tras el pitido final, celebró la victoria muy efusivamente y, además, defendió a Carvajal ante Lamine Yamal. Esta pasión y temperamento gusta, especialmente, a los aficionados que están volviendo a disfrutar junto a este futbolista. Esto siempre es positivo.
En las oficinas de Valdebebas piensan que este posible conflicto entre el bueno de Vini y Xabi va a quedar en un detalle menor sin importancia. Lo importante es que se sacó adelante el Clásico con victoria y que el equipo es líder de LaLiga. Asimismo, las sensaciones son cada vez mejores.