El Barcelona ha caído esta noche 3-5 en el estadio Olímpico Lluís Companys, en un duelo que tuvo de todo, pero en el que el Villarreal logró sobreponerse a los errores arbitrales.
La entidad azulgrana ahora mismo es un drama, lo que deja a Xavi Hernández al borde del abismo, ya que su ubica a 10 puntos del Real Madrid.
Mucho se dice que cuando el fútbol no acompaña a los culés, el colectivo arbitral les ‘favorece’ con sus ‘errores’, pero ni esto ha salvado hoy al Barcelona de la quema.
El Villarreal le ha propinado una manita y con mucho mérito, pese a los fallos de José Luis Munuera Montero, quien le ‘robó’ un gol a Gerard Moreno en el primer tiempo.
Este partido representa lo que ha sido la temporada del Barcelona, además que demuestra la incapacidad de Xavi Hernández en el banquillo de un ‘grande’, que claramente le ha quedado grande.
Sin embargo, la imagen que más ha sorprendido es la del entrenador culé mirando a la cámara gritando «Verguenza, verguenza», después de que el VAR hiciera justicia y anulara un penalti inexistente a favor de la entidad catalana.