Tras caer derrotado por 3-0 contra el Bayern en la última jornada de la fase de grupos, el Barça se clasificó para la Europa League al quedar tercero, como también lo hicieron el Dortmund, el Sevilla, el Leipzig y la Atalanta, entre otros.
Ahora, casi 20 años más tarde, los azulgranas vuelven a disputar la segunda máxima competición europea bajo el nombre de Europa League, antes denominada Copa de la UEFA.
Aunque muchos ya sitúan al Barça como uno de los favoritos para ganar el torneo, lo cierto es que los de Xavi tendrán que apretar el acelerador si quieren superar al Nápoles, uno de los equipos más fuertes de la Serie A. No atraviesan su mejor momento y tienen hasta febrero para pulir detalles y preparar la primera eliminatoria previa a los octavos de final.