En un mal partido del Real Madrid, los 2 mejores, Bellingham y Vinicius construyeron el gol que adelantaba momentáneamente a los merengues
El Real Madrid se plantaba en el Santiago Bernabéu sabiendo que el resultado de la ida les favorecía. El golazo de Brahim daba ventaja a los merengues, aunque era mínima y no se podían confiar.
Quizás por eso, Ancelotti planteó un centro del campo poblado de jugadores, para evitar la contras rápidas de los alemanes que tanto peligro causaron en la ida, aunque eso también tuvo una parte negativa.
En fase ofensiva el equipo estaba sin ideas. Faltaba un jugador que acompañase a Vinicius y generara desmarques de ruptura que pudieran generar un pase o incluso una ocasión de peligro.
El cambio de Rodrygo le permitió al Real Madrid sumar un jugador más y eso se noto cuando Kroos recuperó un buen balón y montó de la nada un contragolpe que empezó a conducir Bellingham.
Jude vio el desmarque de Vinicius, quiso ser generoso y le filtró un buen pase para que fuese él quien lograse el gol, que ponía el 1 a 0 en el marcador, antes del empate del Leipzig.