El Real Madrid sigue preparando el duelo ante el Manchester City del viernes, 7 de agosto, en el Etihad correspondiente a la vuelta de los octavos de final de la Champions.
Tras el día de descanso de ayer, domingo, y con todos los jugadores dando negativo en los test de coronavirus, Zidane diseñó una sesión de entrenamiento en el que dividió al equipo en varios grupos para realizar distintos ejercicios de control, presión y precisión con el balón. El entrenamiento finalizó con varios partidos cortos en un campo de dimensiones reducidas, explica la web del Real Madrid.
En esta primera sesión de la semana, Zidane pudo contar con Isco y Bale que vuelven a entrenar con el grupo. Ambos tenían molestias por unos golpes y no se ejercitaron en varias sesiones de la semana pasada. Ya las han superado y están listos para jugar ante el Manchester City.