Frenkie de Jong protagonizó un partidazo el viernes en el Camp Nou contra el Nápoles jugando con un aparatoso vendaje en la mano izquierda. Una vez finalizado el encuentro ganado por el Barça (3-1), que dio el pase a cuartos de final de la Champions League, Mikky Kiemeney, la pareja del centrocampista holandés, informó a través de las redes sociales que este había sufrido una picadura de abeja que le había provocado una grandísima inflamación y que sigue dejándose notar. Adjuntó una fotografía de horas antes del enfrentamiento de vuelta de octavos de final en la que se veía la hinchazón.
Esta mañana, tal y como se observa en una de las imágenes del entrenamiento del Barça en la Ciutat Esportiva que ha publicado el club en su web oficial, la mano izquierda de Frenkie sigue muy inflamada. La comparación con la mano derecha es más que elocuente. Pese a ello, el holandés se ha ejercitado sin problemas haciendo una sesión de recuperación con vistas ya al duelo del próximo viernes (21 h.) en Da Luz ante el Bayern Múnich en cuartos de final de la máxima competición continental. De Jong se perfila como indiscutible para Setién como interior izquierdo.