El delantero del Paris Saint-Germain vuelve a acaparar el centro de todas las miradas, porque una vez más su futuro vuelve a ser una incógnita. Dentro de una semana será libre para unirse como agente libre a cualquier equipo.
A Kylian Mbappé le gusta estar en el foco de atención de todo el mundo. Está acostumbrado a serlo dese que tiene 18 años, por lo que para él es algo que va unido a su trabajo.
Sin embargo, a los clubes que están pendientes de él no les gusta tanto. Sobre todo al Paris Saint-Germain, que lleva muchos años aguantando filtraciones y rumores sobre su posible salida.
Lógicamente, su situación contractual actual genera que exista el interés de muchos clubes, que no dudan en plantearse la operación, aun sabiendo que la prima de fichaje que pedirá Mbappé será muy alta.
El Liverpool era uno de los clubes que podría estar interesado en su llegada, pero Klopp ya asumió que es algo prácticamente imposible. Desde el club inglés le han dicho que no pueden ficharle. «Entonces será Madrid o París, no hay más», le respondió el técnico a sus jefes.
No es la primera vez que le pasa, porque con Jude Bellingham, Tchouaméni y Camavinga le ocurrió lo mismo. La gran mayoría de jugadores quieren acabar firmando por el Real Madrid.
La grandeza o la mediocridad
Son las dos opciones que tiene ahora mismo Kylian Mbappé. Si se marcha al Real Madrid, dará un salto enorme a su carrera deportiva y es muy probable que se convierta en una leyenda del fútbol.
En el caso de quedarse en el Paris Saint-Germain significaría que no tiene aspiraciones para ser más grande en el fútbol, sino que se conforma con ganar más dinero y disputar una liga menos competitiva en un equipo que aspira a menos títulos.